FLAMENCO A TOPE

lunes, 7 de abril de 2008

LA GUITARRA FLAMENCA

Por Horizonte Flamenco:

La Guitarra Flamenca (I)

Con relación a los orígenes de la guitarra la opinión de los musicólogos ha sido diversa. Se ha mantenido por algunos especialistas que es un instrumento derivado del laud asirio, que a través de Persia y Arabia pasó a Europa.

Otras opiniones mantienen que la guitarra procede de la cítara romana, de origen asirio y griego.
En cuanto a la introducción de la guitarra en la Península Ibérica también existen diferencias de criterio. Hay tratadistas que sostienen que la guitarra era conocida en España antes de la invasión árabe, frente a la opinión que argumenta que la guitarra de origen oriental penetró en Europa y pasó a nuestro pais en forma de dos corrientes simultáneas: la primera, tomando como base la cítara romana, se convirtió en un instrumento musical conocido con el nombre de "guitarra latina punteada". La otra corriente, tomando como base los instrumentos árabes, dió forma a lo que se denominó "guitarra morisca rasgueada".

Juan Ruíz describe las guitarras latina y morisca en el "Libro del Buen Amor": Allí sale gritando la guitarra moriscade las voces aguda e de los puntos ariscael corpudo laud que tiene punto a la triscala guitarra latina con esos se aprisca.Por aquella época era corriente que los propios tañedores construyeran las vihuelas/guitarras. Se pone como ejemplo de este hecho la contestación de "Ziryab" al califa Harum Arraxid, cuando éste le indicó que usara el laud del maestro Ishaq-al-Mawsili. La respuesta de "Ziryab" fue: "Tengo mi laud que yo mismo he construido. Yo he descorchado la madera; yo he trabajado para adelgazarla y no me gusta tener otro laud". A "Ziryab" se le ha considerado por los estudiosos del tema personaje fundamental en el arraigo de la guitarra en España. Según Félix Grande, que se remite a la obra de E. Leví Provenzal "La civilización árabe en España", "Ziryab" habia nacido en Mesopotamia en el año 789, y debido a su tez morena se le habia dado ese nombre, que significa "pájaro negro". En su pais alcanzó "Ziryab" gran notoriedad como músico, hasta el punto de que el califa pidió a Ishaq-al-Mawsili, maestro de "Ziryab", que el joven músico actuase para él. Tanto le agradó su música al soberano que despertó los celos de su maestro, hasta el punto de conseguir que "pájaro negro" se desterrase lejos de la corte; ello le obligó a buscar fortuna en occidente y, en concreto en Andalucia. Y nos dice E. Leví Provenzal: "Cuando Ziryab llegó a España, en el año 822, tenía poco más de treinta años; quedose en el pais hasta su muerte, que ocurrió en el año 857,y durante todo ese tiempo fue el árbitro incuestionable de todas las elegancias y el promotor de todas las modas nuevas, que prevalecieron desde entonces, no solo en el aspecto exterior, sino incluso en el mismo género de vida de los musulmanes andaluces".

En su verdadera profesión, la música, "Ziryab", según nos cuentan sus biógrafos, se mostró un renovador genial en la patria de adopción, que lo habia acogido con tanto entusiasmo.

Creó en ella un conservatorio en el que la música andaluza, primeramente muy semejante a la escuela oriental ilustrada por Ishaq-al-Mawsili, fue tomando prontamente un aspecto completamente original, cuya tradición se ha conservado por todo el occidente musulmán. Además se le debieron diversas invenciones técnicas, tales como, por ejemplo, la de un laud de cinco cuerdas con el que sustituyó al laud tetracorde, hasta entonces el único empleado y conocido; también enseñó el uso de un plectro hecho con garras de águila, en vez del de madera que se acostumbraba a emplear.



La Guitarra Flamenca (II)

A finales del siglo XV y principios del siglo XVI se inicia un periodo en el que el desarrollo técnico en la construcción en España de instrumentos del tipo guitarra-vihuela recibe un gran impulso. Incluso se dictan normas reguladoras referidas a estos instrumentos musicales, como son las Ordenanzas de Violeros de Sevilla de 1502. A mitad del siglo XVI ya no se hacía distinción entre guitarra latina y morisca, sino que se unifica definitivamente el nombre que haría famoso a este instrumento. En efecto, el P. J. Bermudo, en su declaración de instrumentos del año 1555 la denomina simplemente guitarra. Desde muy antiguo existió una tradición andaluza en la construcción de instrumentos musicales de cuerda del tipo vihuela-guitarra. Ambos instrumentos llegaron a fusionarse a finales del siglo XVI.

La diferencia entre la vihuela y la guitarra se encuentra en el número de cuerdas de cada instrumento. En el siglo XVI existían guitarras con cuatro y cinco cuerdas, mientras que la vihuela tenía cinco, seis y siete cuerdas. Paulatinamente la guitarra se va transformando, y puede decirse que es en el siglo XIX cuando reune la figura y condiciones del instrumento musical que actualmente conocemos. La guitarra española llegó a conocerse en el mundo entero, y los guitarreros españoles, sobre todo andaluces, eran muy apreciados, hasta el punto de que sus guitarras se ponían a la altura del famoso "stradivarius", y las guitarras del modelo "Cádiz" llegaron a anunciarseen los catálogos musicales londinenses. Tanto guitarristas como guitarreros españoles sentaron las bases de la guitarra moderna, tanto en Europa como en América Latina, a partir de la segunda mitad del siglo XIX. Se ha considerado a Antonio Torres Jurado (1817-1892) autor de la transformación que se operó en la guitarra primitiva, y que dio como resultado la guitarra española, tal como la conocemos.

Torres Jurado fue un artesano almeriense dedicado a la construcción de guitarras que se estableció en Sevilla y que imprimió a su modelo de guitarra una sonoridad superior al modelo que se utilizaba en aquella época. Al citar a Torres Jurado no se puede olvidar a un ilustre paisano y amigo suyo, como lo fue Julián Arcas, célebre concertista de guitarra en esos años.



La Guitarra Flamenca (III)

Julián Arcas nació el 25 de octubre de 1832 en Villa de María (Almería). Su padre era un buen aficionado a la guitarra. Su inclinación musical influyó, lógicamente, en la inclinación futura del joven Julián. Cuando la familia Arcas se traslada a vivir a Málaga, Julián tenia doce años y en esta ciudad continúa con los estudios de guitarra. Y es en Málaga donde ofrece su primer concierto, a la edad de dieciseis años, constituyendo un gran triunfo para el joven guitarrista. Este primer éxito le facilita actuaciones a continuación en Granada y Madrid, ciudades en las vuelve a triunfar. A partir de estas primeras actuaciones la progresión de triunfos en sus recitales no cesan. Tanto que sin llegar a cumplir los veinte años se le considera un gran guitarrista. A principio de la década de los cincuenta visita Sevilla, y este hecho resultaría muy importante en la historia de la guitarra, ya que se produce el primer encuentro entre Julián Arcas y Antonio Torres Jurado, dedicado este último de forma ocasional a la actividad de guitarrero. Sometida a la consideración de Julián Arcas una gitarra construida por Antonio Torres el músico le dió su aprobación más entusiasta y le animó a que se dedicase en el futuro a la construcción de guitarras.

Nos dice a continuación Eusebio Rioja, autor de una biografía de Julián Arcas, cuya obra seguimos en este relato: "Con el paso de los años y gracias a los ánimos infundidos por Arcas, Antonio Torres se convirtió en el más legendario de los guitarreros de la historia. La amistad que surgió en aquellos momentos entre el guitarrero y el músico se selló años después —en 1868—, cuando Julián Arcas apadrinó los segundos exponsales de Torres". Arcas fue un guitarrista de corte clásico que se acercó con su arte a determinados estilos del flamenco. Se dió la circunstancia de que apareció en el mundo de la música en un momento en el que el arte del flamenco se encontraba en un periodo de maduración. A veces se ha presentado a Arcas exclusivamente como un guitarrista de música clásica y eso no concuerda exactamente con la realidad.

El maestro Otero se refirió al músico en los términos siguientes, reconociendo su valia como guitarrista flamenco: "Este guitarrista célebre ha sido en su época el mejor, pues los tocaores actuales, cuando ejecutan alguna composición a la guitarra, para que escuchen dicen: Siguiriyas gitanas de Arcas; malagueña, jaberas o granaína de Arcas, y casi todos los toques o falsetas llevan el sello de Arcas".


La Guitarra Flamenca (IV)

Por la época de Arcas existió otro guitarrista que destacó en la otra faceta fundamental del toque flamenco, cual es el acompañamiento al cantaor. Se trata del maestro Patiño. José Patiño González, guitarrista gaditano nacido en 1829 "centró sus esfuerzos en conseguir que la guitarra pudiera adaptarse a los tonos de los cataores y no al revés, como se hacia hasta entonces". En aquellos tiempos las posibilidades de la guitarra de acompañamiento se veian limitadas a dos formas simples: El cante "por arriba" (Mi) o el cante "por medio" (La). El maestro Patiño, al inventar la cejilla, probablemente ayudado por el cantaor Paquirri "el Guanté", abría un abanico de opciones que posibilitaban mayor libertad de expresión artística a cantaores y cantaoras. ¿Cuándo apareció la guitarra flamenca como acompañamientoal cante? ¿Se inició al mismo tiempo que el cante o su iniciación fue posterior?. Sobre este punto existen disparidad de criterios. Como ocurre frecuentemente en el mundo flamenco, no existen pruebas que nos conduzcan al conocimiento real de este hecho.


El criterio de A. Mairena y R. Molina niega el inicio conjunto del cante y el toque de guitarra, en cambio Eugenio Rioja opina lo contrario. Lo cierto es que esta unión tuvo una gran importancia para la posterior evolución del arte flamenco. Según Ricardo Molina y Antonio Mairena ("Mundo y Formas del Cante Flamenco"): "la guitarra flamenca o andaluza aparece históricamente como acompañamiento único y propio del cante hacia mediados del siglo XIX". Eugenio Rioja manifiesta su desacuerdo con estos autores y afirma que, en base a las noticias más antiguas, que se refieren al Planeta y al Fillo, en las fechas en que debió ocurrir "Un baile en Triana" (1838), el conocido relato de Serafín Estébanez Calderón, y la fecha en que debió ocurrir la "Asamblea General" (1845), y teniendo en cuenta que hasta 1853, según E. Rioja, no se ha encontrado el adjetivo "flamenco" calificando a unos intérpretes, hecho que se realiza en el año 1865, cuando se presentan como profesionales ante el público Siverio Franconetti, Juan Breva y el Maestro Patiño, llega a la conclusión que el Arte Flamenco iría apareciendo entre los años 1838 y 1865. Por lo tanto, es también a mediados del siglo XIX cuando la guitarra "aparece históricamente como acompañamiento único y propio del cante". Eugenio Rioja destaca que, con anterioridad, la guitarra acompañaba a un folklore andaluz preflamenco, que es el que evolucionó hasta convertirse en Arte Flamenco. Y concluye el autor citado: "Evidentemente no podría acompañar (la guitarra) a un cante flamenco que no existía".


La Guitarra Flamenca (V)

En la segunda mitad del siglo XIX, con el auge de los cafés cantantes, el flamenco inicia un proceso que favorece grandemente tanto al cante flamenco como al toque guitarrístico que le sirve de acompañamiento. Así, la guitarra, que acompaña tanto al cante como al baile, realiza una gran labor de enriquecimiento propio que le vale para abordar posteriormente su lugar privilegiado como guitarra solista. Fernando el de Triana, en su conocida obra "Arte y Artistas Flamencos" afirma: "La historia dice que el primer café cantante establecido en Sevilla lo fue en el año 42 del siglo pasado (se refiere al siglo XIX), en la calle de Los Lombardos". También se refiere el mismo autor al café de Los Cagajones, establecido en la Plaza de La Paja y el café de la calle de Triperas (hoy Velázquez)". Y continúa: "Estos espectáculos fueron campo de acción para estos primeros guitarristas, ya modernizados: el maestro Patiño y Antonio Pérez. El primero decía que la guitarra se habia hecho "pa acompañá ar cantaó" (textual), y eso fue lo que hizo como nadie; el segundo acompañaba muy bien al cante y extraordinariamentre bien al baile". Así pues, el proceso de la guitarra flamenca está claro: La guitarra flamenca o guitarra andaluza, en principio se dedicó al acompañamiento del cante flamenco y no desarrolló su carácter como instrumento de concierto hasta bien entrado el siglo XX. Hasta ese momento podemos decir que este instrumento no tenía identidad propia, ya que su único cometido era acompañar al cante. Desde el punto de vista técnico, la guitarra flamenca, como instrumento de concierto se vió influida por la guitarra clásica, y ello queda reflejado en las grabaciones de los mejores guitarristas flamencos de aquella época. Por otro lado existieron contadas incursiones de guitarristas clásicos en la interpretación flamenca. En base a este hecho se han vertido opiniones considerando la guitarra flamenca como una derivación de la guitarra clásica frente a pareceres que no han aceptado este proceso.



De todas formas, lo importante lo expresa con su opinión el Maestro Don Andrés Segovia: "La guitarra es una montaña con dos vertientes: una es la flamenca; la otra la clásica. Ambas igualmente admirables".

Victoria Cava, Rosario García y Ana Cayuela.

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Publicado por flamenquillas a las 8:27

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